Para muchas personas las diatomeas (diatomita, tierra de diatomeas) pueden resultar algo desconocido, sin embargo, para aquellas personas apasionadas por el cultivo en el huerto o jardín y el vivir la vida con un estilo sustentable puede resultar todo lo contrario.
Las diatomeas son algas unicelulares que se encuentran formando parte de los ecosistemas de las aguas de mares y ríos, en su estructura es fácilmente reconocible una pared celular que se encuentra constituida por sílice opalino o dióxido de silicio hidratado que le confiere una alta resistencia a las agresiones mecánicas.
Es precisamente la fosilización de esta rígida pared orgánica lo que permite la formación de la conocida tierra de diatomeas o diatomita.
En la actualidad, a esta tierra blanca se le dan usos variados, pero en el área en que más resalta su utilidad en es la jardinería. En las siguientes líneas se describen los aspectos más importantes del uso de la diatomita en la jardinería, sin dejar de lado otras importantes propiedades, lo que deja en evidencia las bondades de tan noble material que creó la naturaleza en un proceso de miles de años.
Está más que comprobado que la diatomita es un eficiente agente insecticida, fungicida y bactericida que actúa deshidratando las células de los insectos que constituyen las plagas de los cultivos y de las plantas del jardín.
El uso de la tierra blanca se ha popularizado de modo notorio debido a que es un producto realmente amigable con el ser humano, esto quiere decir que es un material que no causa afectación de la salud de las personas cuando están en contacto con el de modo constante.
Debido a sus cualidades estructurales, la tierra de diatomeas tiene distintas aplicaciones en el hogar, especialmente en el jardín, destacándose entre sus principales aplicaciones el uso como insecticida y fertilizante de plantas.
Este potente agente insecticida de carácter mecánico es sumamente eficiente en la lucha contra insectos indeseables en los cultivos y en las plantas de jardín.
Por lo general, se hace uso de productos especializados para atacar las plagas, por ejemplo, un producto determinado para los piojos y otro para las hormigas, pero en el caso de la diatomita esta se puede usar para aplicar una sola línea de acción que ataque distintos frentes.
Esto resulta bastante positivo desde diferentes aspectos como los costes, la inversión de tiempo y los riesgos a la salud y el ecosistema.
Su secreto se encuentra en el modo en que este fino polvo causa la muerte a estos insectos, pues la tierra blanca para controlar palabras actúa atravesando el exoesqueleto de queratina que recubre a éstos y penetra la estructura celular interactuando con el agua en su interior.
Esta actividad causa deshidratación y una secuencia de eventos que impide el desarrollo de las funciones biológicas de todos aquellos insectos susceptibles.
El alto contenido de minerales de la tierra de diatomeas es, sin duda, una fuente importante de nutrientes que favorece el desarrollo de las plantas, especialmente cuando se encuentran en su fase de crecimiento inicial, pues el magnesio es un mineral que potencia la actividad de enzimas que participan en la síntesis del ADN, lo que se traduce en la estimulación de la división celular y el crecimiento de las plantas.
Por ello, el uso de la diatomita es una excelente opción para quienes se apasionan por trabajar con diferentes platas.
Hacer uso de la tierra blanca para controlar plagas en el jardín es algo realmente sencillo, este es un producto bastante inocuo para el ser humano, en contraste con los insecticidas que se encuentran disponibles en el mercado.
Así que su dosificación se encuentra ligada más que nada con un máximo aprovechamiento del producto y con la magnitud de la plaga que azota el cultivo o jardín.
Cuando se trata de aplicar la tierra blanca como fertilizante, existe una recomendación general que sugiere que se utilice a una razón de 40 a 50 gr por cada m2 de tierra, realizando una mezcla parcial con la tierra del cultivo que se trabajará.
En el caso del uso de la diatomita para controlar plaga en el jardín, deben ser esparcidos unos 100 gr sobre cada m2 del cultivo, haciendo un uso mayor del producto cuando los insectos son de mayor tamaño, no sería lo mismo atacar una infestación de piojos que una de hormigas.
Cuando se busca disminuir los daños causados por plagas aéreas, lo mejor es aplicar pulverizaciones con diatomitas, para lo que se debe preparar la solución insecticida a razón de 40 gr de tierra blanca por cada litro de agua.
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