El Instituto Colombiano Agropecuario (ICA) prohíbe el uso e importación de insecticidas con clorpirifos en cumplimiento a lo ordenado por la Corte Constitucional bajo Sentencia T-343/22 en beneficio de la salud pública y ambiental.

Contexto

El 5 de octubre de 2022 la institución judicial emite la sentencia T-343/22 ordenando la suspensión de la comercialización y eliminación del uso de clorpirifos. La sentencia se basa en las evidencias de la Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos (EPA) sobre el alto riesgo de este componente químico para la salud humana.

“En las personas, la exposición por poco tiempo, un día, a niveles bajos tipo miligramos puede causar mareos, fatiga, secreción nasal, lagrimeo, salivación, náusea, molestia intestinal, sudor y cambios en el ritmo cardíaco. Los informes también muestran que la exposición a clorpirifos por poco tiempo puede causar debilidad muscular en las personas, semanas después de la desaparición de los síntomas originales. Otras consecuencias de la exposición al químico abarcan cambios de conducta o hábitos de sueños, cambios de humor y efectos en el sistema nervioso y en los músculos de las extremidades”, afirmó la EPA en su portal.

Revisa aquí la resolución del ICA 

Por otro lado, los países de la Unión Europea junto con Estados Unidos vetaron el uso del insecticida con el fin de proteger a sus ciudadanos y medio ambiente. Colombia, además de alinearse a estos intereses para su territorio, es un proveedor constante de productos agrícolas en estos países y para continuar con las relaciones comerciales era necesario eliminar el uso de clorpirifos en la agricultura.

¿Qué es clorpirifos?

El clorpirifos es un plaguicida organofosforado (compuesto orgánico biodegradable que contiene enlaces de fósforo-carbono) que es utilizado en cultivos, animales y edificios, para la eliminación de plagas, principalmente insectos y gusanos. Su fórmula química es C9H11Cl3NO3PS. Es uno de los principales causantes de la muerte de las lombrices, altamente beneficiosas para el suelo, peces y flora acuática, y polinizadores como abejas, aves y murciélagos.

Foto: Cultivo de limón en Colombia

Durante muchos años se utilizó principalmente en productos cítricos como naranjas, mandarinas, limones y pomelos, producción de olivas, huevos de gallina, manzanas y plátanos, entre otros, para el control de larvas de lepidópteros, escamas, chanchitos blancos y pulgón lanígero.

Opiniones del sector

Carlos Sánchez, ingeniero agrícola y líder de la Asociación Amigos de las Abejas (AAB), habló con Portalfrutícola.com sobre esta decisión y afirmó que “lamentablemente creemos que fue una decisión tardía pues en Estados Unidos, Europa y países latinoamericanos este químico estaba prohibido desde 2019 o antes. Y por dos años más veremos las consecuencias negativas en salud pública, animal y ambiental del uso de este insecticida. Por otra parte, nos alegramos de que este envenenamiento haya tenido fin”.

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Para finalizar, la Asociación Hortofrutícola de Colombia (ASOHOFRUCOL) celebra este tipo de acciones que buscan proteger el medio ambiente y la salud humana, e invita a que los productores utilicen el método de agricultura tropical, que ha demostrado casos de éxito.