Destacados

Manejo de combustible en el campo

06 Febrero 2024

Almacenamiento y manejo de combustible en el campo. Cómo evitar impurezas

El combustible, fuente de energía de todas las actividades productivas del país, es un insumo de gran incidencia en los costos de producción de una empresa agrícola, por lo cual, uno de los aspectos a considerar en el manejo productivo de un predio, es el adecuado almacenamiento y control del combustible en el campo. Tarea clave que, si no es realizada adecuadamente, puede causar múltiples problemas en las labores de producción, al afectar el motor del tractor (Figura 1).

Labores como la labranza de suelo, aplicaciones de plaguicidas y fertilizantes, siembras y cosecha de la producción, implican una demanda importante de energía por parte de los tractores. Cualquier falla en los sistemas de alimentación de combustible de éstos, ocasionarán complicaciones en las labores indicadas. Esto afectará la oportunidad y momento cuando deben ser realizadas las labores.

En general, las empresas comercializadoras de combustibles en el país incorporan rigurosas normas para lograr en la distribución, productos libres de impurezas sólidas y líquidas, minimizando con ello las posibles contaminaciones. Sin embargo, las impurezas aparecen como consecuencia de una mala recepción de los combustibles. Un incorrecto almacenamiento, o un manejo inadecuado de estos en el campo.

Formas de contaminación del combustible en el campo

Las impurezas más comunes en el campo, son las partículas de tierra fina, que incluye a arcillas y limos finos, además del agua. Las primeras son las más peligrosas, porque pueden no ser retenidas por los filtros de combustible, y en el caso del agua, esta se incorpora de una forma externa, como interna, al interior de los estanques de almacenamiento de combustible y en el estanque del tractor, si no se toman las medidas preventivas necesarias. Las contaminaciones del petróleo Diesel, podrían ocasionar serios problemas en las bombas de combustible, bombas inyectoras, inyectores e incluso en el funcionamiento del motor.

combustible en el campo

Contaminación por sólidos

La tierra y sus partículas finas provienen del polvo que está suspendido en el ambiente, y que se encuentra adherido en las superficies de mangueras, embudos, recipientes, entre otros. Esta contaminación es facilitada por las características mismas del petróleo, el cual demora en secarse y se convierte en un “atrapador de polvo”.

De acuerdo con lo anterior, es de gran importancia mantener una estricta limpieza en todas las etapas de manejo del combustible. Además, los circuitos por donde pasa este elemento en el tractor no deben tener fugas ni sectores donde su paso sea resistido por dobleces, abolladuras u otras imperfecciones de tuberías o mangueras. Una de las formas más efectivas de proteger a un motor de las partículas de polvo, es la limpieza del filtro de combustible en forma frecuente. Al respecto se recomienda que los filtros sean reemplazados como máximo, cada dos cambios de aceite del motor. Además, se debe vaciar los sedimentos del estanque de petróleo, purgando el sistema de combustible y limpiando la taza de sedimentos.

Contaminación por agua

El agua se incorpora a los estanques o tambores de almacenaje de dos formas: externa e interna. La externa, penetra directamente en el tambor por acumulación de agua de lluvia o gotas que se forman después de una niebla matinal sobre las bocas de carga.

También, durante períodos de calor, el aire interno se dilata y al bajar la temperatura se contrae incorporando aire externo y, con él, partículas de gotas de agua. Obviamente, a mayor número de días en que se presentan estas condiciones, mayor será la cantidad de agua acumulada.

Hay que tener presente que este problema puede ocurrir aun cuando la tapa ubicada en la boca de carga del estanque o tambor esté colocada. Esta forma de contaminación puede ser fácilmente evitada, ubicando las tapas del tambor o estanque en una posición donde no se acumule agua, protegiéndolas e inclinando levemente los mismos en un ángulo aproximado de 3° a 6°, con respecto al suelo (Figura 2).

combustible en el campo

La segunda forma de contaminación por agua es en forma interna al estanque o tambor. Esta es causada por la condensación de la humedad del aire que se encuentra dentro de los recipientes o estanques al enfriarse durante la noche. Este fenómeno ocurre en todo tipo de estanques, lo cual indica que es válido también para los estanques de combustible ubicados en las máquinas y tractores.

Una forma de evitar la contaminación por agua es mantener los estanques y tambores llenos antes que llegue la noche. Esto aplica especialmente para los tractores agrícolas (Figura 3).

Almacenamiento de combustible en el campo

La demanda de combustible en un predio agrícola, en especial de petróleo, requiere de un “stock” para evitar sucesivos viajes a los centros de abastecimiento y cubrir los períodos de gran demanda, lo cual se traduce en una disminución de costos. Esto se puede lograr con la utilización de estanques y tambores que, manejándolos adecuadamente, permiten controlar la calidad y limpieza del combustible.

Para los almacenamientos en predios agrícolas, se puede realizar en tambores o estanques, los primeros solo presentan una capacidad entre los 20 y los 227 litros. Los segundos, una capacidad sobre los 227 litros. En este caso se debe tener un extintor de al menos 10 kg y capacidad de apague 40BC.

El almacenamiento de combustibles en faenas agrícolas no podrá exceder de 4 m3 en tambores, incluyendo como máximo 630 litros de combustible Clase I y 2.100 litros de Combustible Clase II. Dentro de este último el petróleo Diesel.

Bodega de combustible

La bodega donde se almacena el combustible en tambores deberá ser de material incombustible, y no deberán existir fuentes de ignición. Además, deberán contar con un sistema de ventilación mecánica que provea al menos 0,3 m3 /min de aire de escape por cada metro cuadrado de piso. No inferior a 4 m3 /min, o ventilación natural equivalente.

En caso de que los tambores de combustible estén ubicados en recintos, se considerará un área de seguridad de 2 metros alrededor de los envases.

Se debe tomar las precauciones necesarias para evitar los derrames de combustible. En todo caso, debe disponerse de bandejas, o pretiles, o arena, o drenajes adecuados para absorber los eventuales derrames. Se deberá controlar mensualmente, la hermeticidad de los tambores y válvulas de servicio.

Incorporar letreros de advertencias, tales como, “INFLAMABLE-NO FUMAR NI ENCENDER FUEGO”, visibles a lo menos a 3 metros de distancia.

Se recomienda que los tambores o estanques, permanezcan inmovilizados en un área libre de ignición, cerrados, bajo techo, ventilados y bien señalizados.

Tiempo de reposo del combustible en el campo

Una norma recomendable que rige para los distintos tipos de contaminantes es el tiempo de reposo. Las arenas finas y limos requieren de 24 a 28 horas, el agua 48 horas y las partículas finas de arcilla hasta 66 días. Este proceso, conocido como decantación, se cumple siempre y cuando los estanques se encuentren fijos y a temperatura uniforme (a la sombra).

El estanque mismo deberá poseer una pendiente del 1 al 2% hacia la boca de carga. En el extremo inferior se ubicará el drenaje utilizado para la eliminación del agua y las partículas acumuladas (Figura 4).

En el otro extremo se colocará el tubo chupador fijo al estanque y asegurado, para evitar las vibraciones que actúan como removedor de combustible y ponen en suspensión las partículas decantadas. Para evitar turbulencias en el fondo del estanque se debe realizar lo siguiente. Es importante hacer dos perforaciones en el tubo a 10 o 20 centímetros de su extremo inferior, el cual debe sellarse.

combustible en el campo

 

combustible en el campo

Finalmente, el estanque debe contar con una boca de inspección y un tubo de respiración con una válvula, y acodado hacia abajo para impedir la entrada de polvo y agua.

Recomendaciones generales

-Antes de un nuevo llenado del estanque, se debe abrir la llave de purga para eliminar el agua y las partículas decantadas.

-Inmediatamente después de recibir el combustible, se debe dejar reposar por un período no menor a cinco días con el objeto de que las impurezas que puedan venir en el mismo, y las propias del acumulador puedan decantar.

-La llave de purga se debe abrir cada 8 a 10 días.

-Los estanques de combustible de tractores y máquinas deben ser llenados totalmente al terminar la jornada si no se trabaja de noche. Así evitamos la condensación del agua dentro de los mismos, con las bajas temperaturas nocturnas.

-Es bueno contar con dos estanques o tambores, con el objeto de usar uno como recipiente y el otro como almacenador definitivo. El petróleo mantiene su calidad hasta seis meses, sin problemas.

-Se debe realizar un correcto mantenimiento del circuito de combustible de los motores, respetando las instrucciones dadas por el fabricante.

-Los grandes volúmenes de los estanques de combustible en tractores de gran potencia (200 a 400 litros) hacen difícil la carga manual, generándose importantes pérdidas de tiempo. Lo anterior significa una disminución de la eficiencia de campo de los equipos agrícolas, y por lo tanto, pérdidas económicas. Razón por la cual se hace necesario el manejo del combustible con bombas mecánicas provistas de filtros de buena calidad.

El contenido de este artículo de nuestra sección de Agronotips fue elaborado por Jorge Carrasco J. y Patricio Abarca R., INIA Rayentué, para www.inia.cl. Fue revisado y reeditado por Agronotis.com

El uso de este sitio Web implica la aceptación del aviso legal y política de privacidad de Portal Frutícola. © 2008 - 2024