Recomendaciones agronómicas para el cultivo del cerezo previa al otoño
Iniciamos el mes de marzo por lo que se aproxima el otoño al hemisferio sur, instancia en que los productores deben de estar atentos a los manejos agronómicos previo al periodo de dormancia del cultivo del cerezo.
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El asesor experto en cerezas, Walter Masman entregó algunas recomendaciones a los productores, con el objetivo de poder preparar el cultivo antes del periodo de receso.
Comenzando marzo, el asesor de cerezos indicó que lo primero que el productor debe entender es que el árbol se encuentra ad portas de entrar en el período de receso “es un tema importante para los cerezos, ya que es una especie bastante demandante en la calidad de las horas frío, por lo que es fundamental que el árbol entienda este cambio de entrar en este periodo de letargo y lo haga de buena manera”.
Masman explicó que en estas fechas los árboles ya debiesen estar con sus aplicaciones de postcosechas realizadas, particularmente lo que tiene que ver a nivel nutricional. “Por lo tanto, cualquier aplicación tardía desde el punto de vista de poder incentivar a que el árbol pueda partir el receso, sumado a las condiciones climáticas que eventualmente no son las adecuadas”.
Agregó que en el caso de que se mantengan las altas temperaturas el árbol, probablemente no va a tomar el camino de la entrada de receso, pese a que todos los días la luminosidad va disminuyendo, “sin embargo, si yo comienzo a fertilizar o a regar de más para tener un árbol bajo una condición de pro-vigor o pro-metabolismo, el árbol indudablemente le va a costar más este inicio en la entrada de receso”.
En ese sentido señaló que actualmente los programas de fertilización ya debiesen estar absolutamente finiquitados y debiesen de comenzar con las restricciones de riesgo, que van siempre de la mano con el tema climático. “Las temperaturas también comienzan a descender, la luminosidad también comienza a bajar por tanto el árbol, comienza a bajar sus requerimientos. Si de aquí en adelante comienzan los días nublados y comienza a hacer más frío, probablemente el cambio en la decisión de riego va a ser aún más abrupto, por lo tanto, siempre va de la mano a lo que va ofertando el tema climático”.
Enfatizó en que los productores tienen que aprender a leer a través de observación de calicatas, el estado del árbol, el cargo de la coloración de la hoja, la degradación de clorofila, etc.
“Existen aplicaciones que efectivamente reducen el metabolismo del árbol y una de ellas son las aplicaciones de molibdeno, hemos visto en el tiempo, que genera un aumento a nivel de reservas para la temporada que viene, por lo tanto, creo que es una aplicación válida para considerar bajo esta condición de cambio climático”.
Otra de las recomendaciones realizadas por el asesor, va en línea con los manejos agronómicos posterior a lo que concierne a las aplicaciones preventivas para el desarrollo de enfermedades, particularmente asociados a los hongos de madera y también bacterias, como pseudomonas.
“Todos estos manejos, son fundamentales para este periodo que comprende entre marzo y abril, considerando que ya los árboles a fines de mayo debiesen estar ya con el 100% en términos de caída de hojas”.
Finalizó diciendo que cada hoja que cae del árbol es una herida natural que puede provocar el ingreso de cualquier hongo y bacteria. “Por lo que es importante mantener estos manejos preventivos durante todo el receso, todo el invierno hasta ya empezar a preparar el periodo en primavera, para la floración”.