Día Mundial de la Inocuidad de los Alimentos
Hoy se celebra el Día Mundial de la Inocuidad de los Alimentos, que tiene como objetivo crear conciencia e inspirar acciones para ayudar a prevenir, detectar y gestionar los riesgos transmitidos por los alimentos.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), son las entidades de la ONU encargadas de coordinar la celebración de este día, en colaboración con los Estados miembros y otras organizaciones pertinentes.
Es en ese contexto, Portalfruticola.com conversó con el coordinador general de inocuidad de los alimentos de Agrocalidad (la Agencia de Regulación y Control Fito y Zoosanitario de Ecuador), Rommel Betancourt, quien explicó la relevancia que tiene esta en las exportaciones del país.
Para Betancourt la inocuidad alimentaria es un asunto compartido entre todos los actores de la cadena de suministros de alimentos. "Es responsabilidad de todos, porque la seguridad de un alimento quiere decir que no va a causar alteraciones en la salud de quien lo consume", dijo.
Indicó que cifras informadas por la OMS nos invitan a reflexionar, “porque uno de cada diez consumidores adquiere una enfermedad transmitida por alimentos, eso se traduce en cifras de aproximadamente 600 mil personas al año. También hay decesos que llegan a 420 mil personas al año. Son cifras que nos llaman la atención y que nos deben invitar a reflexionar sobre el rol que cada uno de nosotros está cumpliendo en la cadena de suministro de alimentos”.
Agroexportaciones
Betancourt fue enfático al decir que Ecuador tiene una fuerte vocación agroexportadora. "De hecho, somos la despensa del mundo, sobre todo de frutas tropicales o exóticas", puntualizó
Explicó que en el país tiene una guía de buenas prácticas agropecuarias, una certificación pública -que es un estándar de buenas prácticas a nivel de campo y estatal-, con el objetivo de que Ecuador se diferencia en el área internacional, así como los productores que están comprometidos con un sistema de producción sostenible.
Destacó que en temas relacionados a frutas y hortalizas la responsabilidad es aún mayor, “porque muchas de ellas se consumen en su estado primario, básicamente las lavamos y las consumimos".
"En algunos casos les podemos sacar la cáscara, por lo tanto, a nivel de productores debemos verlo con ese añadido de responsabilidad, porque obviamente el consumidor va a ingerir este producto de una manera casi directa”, agregó.
Desafíos
Consultado por los desafíos de Ecuador en el tema de la sustentabilidad, el vocero de Agrocalidad fue claro al decir que los retos son gigantes, tanto por el cambio climático que está poniendo en jaque a muchos sistemas productivos, como por la fuerte demanda de los consumidores por respuestas más inmediatas.
Dijo que el producto debe estar acompañado de prácticas sociales, ambientales y de sostenibilidad, más allá de la exigencia sobre la inocuidad de los alimentos, “entonces la invitación que nosotros hacemos a nuestros productores, es empezar por lo básico, comenzar a trabajar con buenas prácticas agropecuarias”.
En Ecuador las buenas practicas agropecuarias se sustentan en cuatro pilares: la inocuidad del alimento, la protección de la salud del trabajador y del campo, y la protección del ambiente.
Añadió que este año el lema es '¿está usted preparado para lo imprevisto?', “porque puede ser que hagamos bien las cosas o nos esforcemos por hacerlas bien, pero puede pasar alguna situación que nos saque de ese estatus y nos cause revuelo”.
En esa línea comentó que Agrocalidad está trabajando con la cooperación internacional del Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura, y el Comité Nacional del Codex Alimentarios.
“Nosotros tenemos un compromiso profundo con la sostenibilidad en el sistema productivo agropecuario y lo estamos manejando de una manera transversal, no solo en nuestra cartera del Ministerio de Agricultura y Ganadería, sino con otros ministerios”.
Para Betancourt es un tema de políticas de Estado la buena práctica agropecuaria, ya que de esa forma se fortalece el sistema de trazabilidad, para dar señales de confianza en los mercados de destino. Añadió que es necesario fortalecer la investigación aplicada, con el objetivo de continuar invirtiendo en la capacidad analítica, no solamente en la infraestructura de los laboratorios, equipamientos y modernización, sino también en la acreditación de las metodologías.
Finalizó diciendo que la sostenibilidad es una tarea compartida desde el lado productivo, por convencerse de seguir produciendo más y mejor en menos área agrícola, no deforestando, sino que reforestando y usando herramientas tecnológicas de acuerdo a las recomendaciones.