Durante el Global Grape Convention 2024, evento que unió a la industria de la uva de mesa de Chile y Perú, América Ramírez, jefe de estudios e Inteligencia de Mercado en Decofrut, expuso el interesante panorama que enfrenta la fruta a nivel mundial.
Indicó que en los últimos 10 años la producción de uva de mesa aumentó un 33%, crecimiento impulsado por China, mercado que está priorizando la producción local en lugar de las importaciones.
“La producción en China este año, acorde a cifras del USDA, alcanzaría 13,5 millones de toneladas. Hace 10 años, China, en conjunto con India, absorbía el 50% de la producción. Este año, ya podemos ver que China absorbe el 50% por sí solo de la producción mundial”, dijo.
Comentó que, en general, todos los países del hemisferio sur han crecido en producción, salvo Chile, cuyos volúmenes han disminuido en el tiempo, mientras que en el hemisferio norte la producción es arrastrada por China e India.
Pero, para explicar el panorama mundial, Ramírez analizó lo que fue la temporada 2023-2024, las tendencias de consumo y qué puede esperar y hacer la industria.
Detalló que la exportación mundial en dicho período alcanzó los 3,6 millones de toneladas, donde el hemisferio sur representó el 46% y el hemisferio norte el 54%. Dentro de este último se encuentra China, con un 25% de participación, seguido por India con un 17%, México con un 12% y Estados Unidos con un 9%, entre otros.
En el caso del hemisferio sur, la distribución de las exportaciones fue un poco más equitativa, con Chile y Perú, cada uno con un 32%, Sudáfrica con un 21%, Australia con un 10%, seguida de otros orígenes que, en conjunto, representaron el 7%.
Tanto la fruta de Chile como Perú tuvo como principal destino Norteamérica, específicamente Estados Unidos, al igual que la segunda cosecha de Brasil (octubre-diciembre), ya que el gigante de Sudamérica aprovechó las condiciones que se dieron en el mercado.
Por otro lado, Sudáfrica se concentró en Europa, relegando al segundo lugar a Norteamérica. Al igual que el país africano, India, que tiene cosecha de diciembre a mayo, se centró en el mercado europeo, “y viene a competir directamente desde el mes de enero con las frutas chilenas y peruanas”, dijo América.
“Europa es un mercado que está cada vez más estrecho. Sobre todo, pensando que Sudáfrica crece constantemente también en los volúmenes y, de no haber eventos climáticos, va a seguir esa constante (…) India también aparece fuerte en Europa y hacia el final de las temporadas empieza a aparecer Egipto”, detalló.
“Cuando ingresa India, que es desde enero en adelante, y cuando ingresa Egipto, que es en la última parte de la temporada chilena, los precios sí se ven presionados. En el caso de Egipto, los primeros precios son bastante buenos. Entonces, compiten con otro tipo de productos, sobre todo que la uva chilena ya está un poco más de salida”.
En el caso del consumo, en Estados Unidos este se ha mantenido al alza, pese a que la producción ha ido a la baja, lo que viene mucho de la mano de las importaciones y de la producción local, señaló la especialista de Decofrut.
En la Unión Europa se presenta una disminución en el consumo, que pasó de poco más de 6,5 kilos per cápita, a uno 5 kilos, mientras que en India, a pesar del aumento de la producción y de las exportaciones, Ramírez comentó que este país mantiene su consumo relativamente estable.
Pero lo llamativo es China, ya que prácticamente duplica el consumo de uva de mesa en los últimos 10 años- “China dejó de ser dependiente de las importaciones”, recalcó América.
¿Qué está pasando en China? Ramírez dedicó un espacio en su presentación para este mercado, donde la producción local va al alza y las importaciones a la baja, siendo un mercado que depende cada vez más de su producción, cuya temporada ha logrado extenderse.
“Qué es lo que ha pasado entre Chile y Perú; ambos han disminuido aproximadamente un 30% los envíos durante la última temporada. La verdad es que son volúmenes bastante bajos y la competencia alcanza a ser un par de semanas solamente”, dijo.
“La verdad es que las bandas de precios se mantienen relativamente estables, no viéndose afectados mayormente por la oferta, pero sí por la calidad de la oferta. Eso es lo más importante en este mercado”, detalló.
Ramírez explicó a los presentes que hoy en China hay un fuerte desarrollo de variedades y tienen mejores condiciones productivas, que se suman a un clima bastante más amplio. También se da que se producen dos estados de madurez en la misma parra al mismo tiempo.
“Normalmente, la producción era entre junio y septiembre, Ahora podemos hablar que es de marzo a diciembre”, puntualizó.
En Estados Unidos, dijo, habría una distribución habitual de los volúmenes de Chile y Perú (50-55%), ambos con volúmenes al alza.
“Hay que redistribuir sí o sí a otros mercados. El 65% que mandó Chile a Norteamérica y 61% a Estados Unidos no es sostenible en el tiempo, sobre todo porque los exportadores van aumentando también sus volúmenes. Es importante la información oportuna para retail y programas (...). El foco tiene que estar en la calidad de condición. Eso no se nos puede olvidar”.
En Europa, el consumo va a la baja y el mercado es cada vez más estrecho. "Hay una tendencia a la baja en los volúmenes de Chile y Perú versus Sudáfrica, India y Egipto", expuso.
“¿Qué es lo que se ve en la temporada 2024-2025 en Europa? La temporada local presenta menores volúmenes, principalmente de Italia. La concentración se espera que sea en agosto y quizás permita que cuando llegue la uva peruana en las primeras etapas no haya tanta competencia con la uva local... esperemos”.
En cuanto a China, tuvo un mensaje específico para los chilenos. En este mercado, sí son muy importantes las variedades que se envíen, las que deben tener una excelente calidad, calibres grandes y primas principalmente.
“Tampoco se nos puede olvidar, sobre todo a los chilenos, que hay una competencia entre especies. Cuando parte la temporada de uva de mesa, la cereza ya está instalada en el mercado chino, entonces se genera una competencia entre especies, con cerezas principalmente, pero también tenemos a los carozos”.
En término generales, señaló que en 2024-2025 se "volverá a la realidad", con volúmenes de Perú al alza, Estados Unidos con cosechas normales y el norte de Chile se recuperaría de la sequía y de un fenómeno de El Niño que tuvo un impacto principalmente fisiológico en la fruta.
“Se acaba el veranito de San Juan. Vimos muy buenos precios este año ¿Qué es lo que se puede hacer? El trabajo conjunto en lo que es Chile-Perú. Tenemos similitud de mercados, de destinos, de temporalidad, de oferta. Entonces, la verdad es que nos hacemos un flaco favor (sic) si es que no hacemos este trabajo conjunto”.
“La información tiene que ser fiable y oportuna. Esto es transparentar a un retailer. Buscar el equilibrio entre la oferta y la demanda. No podemos sobre ofertar si es que no hay un mercado en donde. Y hay que tomar en cuenta la calidad y la condición, eso fundamental".
Agregó que es necesario prospectar nuevos mercado, que sean alternativas y viables. “Latinoamérica se ve como un mercado que hay que observar. Hay países en donde la uva ha tenido un buen lugar y la calidad y la condición tiene que ser consistente en el tiempo".
La convención fue fruto del trabajo conjunto de Yentzen Group con el Comité de Uvas de Frutas de Chile y la Asociación de Productores de Uva de Mesa de Perú (Provid). El evento reunió a 1.050 asistentes y 60 empresas participantes.