Se prevé que la industria de los melocotones (duraznos) y nectarines alcance un valor de 24,2 millones de dólares en 2032, según un informe de DiMarket. Este crecimiento representa una CAGR del 3,46% durante el período previsto.

Esta alza se atribuye a factores como los beneficios de las semillas híbridas, las iniciativas gubernamentales, las crecientes preocupaciones sobre la seguridad alimentaria y los avances tecnológicos. 

Las semillas híbridas ofrecen mayor rendimiento, resistencia a enfermedades y mejor calidad de la fruta, lo que impulsa su adopción en la agricultura comercial.

La producción mundial se ha mantenido bastante estable durante los últimos cinco años, oscilando entre 650.000 y 710.000 toneladas. China lidera la producción mundial y aporta más del 50% del total.

Estas categorías son cruciales en la agricultura global y su consumo se extiende desde el fruto fresco hasta los productos procesados, como mermeladas, jugos y alimentos enlatados. 

La agricultura de precisión, el manejo integrado de plagas y las técnicas avanzadas de riego han impactado significativamente en la productividad y la sostenibilidad de ellas.

Las ventajas de la industria incluyen contribuciones económicas a las economías rurales, beneficios nutricionales y apoyo a la biodiversidad. El progreso tecnológico y las cadenas de suministro eficientes continúan impulsando el crecimiento y la resiliencia en este ámbito agrícola vital.