Desde el 1 de octubre, la Asociación Internacional de Estibadores de Estados (ILA, por sus siglas en inglés) se declaró en huelga, luego de no llegar a un acuerdo con la Alianza Marítima del país (USMX), respecto a un aumento de sueldo para los trabajadores e impedir la automatización de las actividades. 

La situación tiene a importadores y exportadores en alerta, ya que la paralización afecta a terminales portuarias desde Maine a Texas, donde llega todo tipo de carga, incluyendo fruta.

Entre los países que están pendientes de esta situación está Chile. Desde Frutas de Chile informaron que existe preocupación por la extensión que podría tener el conflicto, porque hay embarques que están llegando esta semana a la costa este de Estados Unidos.

“Lamentamos que no se haya alcanzado un acuerdo entre las partes y hoy la logística mundial se ve enfrentada al desafío que contempla una paralización de los puertos de toda la costa este de Estados Unidos”, indicó Miguel Canala-Echeverría, gerente general de Frutas de Chile.

“Como Frutas de Chile nos encontramos monitoreando muy de cerca la situación, ya que si el conflicto se extiende en el tiempo, podría afectar a frutas que se encuentran en tránsito”, dijo.

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El gerente general detalló que “actualmente nuestros registros nos indican que estarían siendo afectados más de 580 contenedores de frutas frescas chilenas, algunos de los cuales habrían sido dejados en Panamá ante imposibilidad de continuar a destino o bien que no podrán desembarcarse al llegar a la costa este, quedando el buque a la gira con los costos asociados y la pérdida de los programas de entrega a los distribuidores en Estados Unidos”. 

Especificó que estos contenedores corresponderían a aproximadamente 11.743 toneladas de fruta fresca chilena (11.362 toneladas de cítricos, 177 de kiwis y 204 de paltas), por un valor FOB estimado de USD 37 millones de dólares.

Canala-Echevería puntualizó que “hay que considerar que las navieras tienen un itinerario que cumplir y la norma les permite derivar la carga o dejarla en el puerto más cercano al programado si la situación lo amerita”. 

“Así las cosas, por ejemplo, si un barco no puede desembarcar la fruta en los puertos de la costa este y su siguiente escala es un puerto en Europa, lo más probable es que la nave espere un tiempo prudente y continúe a su próximo destino, con el consiguiente deterioro de la carga y costo para el productor y exportador chileno”.

La opinión desde los productores

Desde la Federación de Productores de Frutas de Chile (Fedefruta), su presidente, Víctor Catán, también lamentó el paro portuario, el cual afecta directamente a los embarques de fruta chilena hacia ese país. 

“Nos parece lamentable que estén paralizadas las faenas portuarias y, al mismo tiempo, hacemos un llamado a las partes para que puedan conciliar, acordar y resolver sus diferencias, a fin de que los puertos en Estados Unidos puedan seguir funcionando”, dijo.

Agregó que “creemos que se hace un daño tremendo a la población estadounidense que se ve privada de bienes y alimentos, y en el caso nuestro imposibilitando la entrada de frutas de primera calidad que abastecen los distintos supermercados en ese país”, agregó.

Esta es la primera huelga de la ILA desde 1977.

*Noticia en desarrollo