Huelga en los puertos de Estados Unidos: ¿Quién protege mi carga?

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Huelga en los puertos de Estados Unidos: ¿Quién protege mi carga?

Por Rafael Guarda Martínez, abogado-consultor, RG Consultant.

El 1 de octubre de 2024 marcó el inicio de una huelga portuaria histórica en Estados Unidos, afectando la costa este y el Golfo del país. Esta huelga, protagonizada por los estibadores de la ILA, afecta más del 43% del comercio marítimo estadounidense. El impacto es significativo: desde frutas y verduras exportadas desde América Latina, hasta piezas industriales necesarias para las fábricas estadounidenses, todos los bienes que atraviesan estos puertos enfrentan interrupciones considerables. Rafael Guarda

En este contexto, los exportadores deben estar atentos a las implicaciones legales que esta huelga puede tener sobre sus operaciones comerciales.

Obligaciones de los transportistas: ¿Qué dice la ley?

El transporte de carga está regido por normas y regulaciones específicas que buscan proteger los intereses de todas las partes involucradas. En Chile, el Código de Comercio establece claramente las responsabilidades de los transportistas marítimos. De acuerdo a nuestro sistema legal, el transportista tiene la obligación de entregar la carga en las mismas condiciones en que fue recibida y debe realizar todo lo necesario para evitar cualquier daño, pérdida o retraso, que ocurra mientras la mercancía esté bajo su custodia. Este periodo cubre desde la recepción en el puerto de origen hasta la entrega en el puerto de destino al consignatario, o quien esté facultado para recibirla. 

Uno de los aspectos más relevantes para los exportadores de fruta, es la obligación de mantener la temperatura adecuada de los productos perecibles durante el transporte. La huelga no exime a los transportistas de cumplir con este requisito. Un quiebre en la cadena de frío puede generar pérdidas significativas y la responsabilidad recae en el transportista, quien debe garantizar que la carga llegue en buen estado al puerto de destino, incluso en medio de una huelga. Asimismo, no lo libera de situaciones que puedan ocurrir durante el viaje, como un incendio, un problema técnico como avería de motor u otros casos que escapen de la huelga.  

Fuerza mayor y huelgas: ¿Es una excusa válida?

En términos legales, el concepto de fuerza mayor o caso fortuito puede liberar a una parte de su responsabilidad contractual si se demuestra que un evento imprevisto e irresistible impidió el cumplimiento de sus obligaciones. Sin embargo, es importante considerar que, desde el momento en que la huelga fue anunciada, dejó de ser un hecho imprevisible. Los transportistas que continúan ofreciendo servicios a los puertos afectados después del anuncio oficial de la huelga difícilmente podrán alegar fuerza mayor para justificar retrasos o incumplimientos.

Esto significa que los exportadores deben estar preparados para posibles retrasos, pero también deben ser conscientes de que los transportistas no podrán eximirse de responsabilidad tan fácilmente. Es crucial que los exportadores monitoreen de cerca la evolución de la huelga y mantengan una comunicación constante con sus agentes de carga para minimizar cualquier posible daño.

Las pólizas de seguro y la cobertura ante huelgas

Otro aspecto esencial para los exportadores es la revisión de las pólizas de seguro de transporte. Muchas pólizas incluyen cláusulas específicas que cubren o excluyen los riesgos relacionados con huelgas. Es fundamental que los exportadores se familiaricen con los términos de sus pólizas, especialmente en lo que respecta a las coberturas, exclusiones, deducibles y procedimientos de activación.

Por ejemplo, si una póliza no cubre daños relacionados con huelgas, los exportadores deberán evaluar las alternativas disponibles para mitigar las pérdidas. Entre las posibles acciones se incluyen el almacenamiento temporal de la mercancía en puertos no afectados, la reprogramación de envíos o la búsqueda de rutas alternativas para evitar los puertos en huelga.

Conclusión

La huelga portuaria en los Estados Unidos plantea desafíos importantes para los exportadores de frutas y otros bienes. Sin embargo, la legislación ofrece herramientas para proteger los intereses de los exportadores, siempre y cuando se mantengan vigilantes y proactivos en la gestión de sus embarques y los riesgos asociados. A largo plazo, la clave está en prepararse adecuadamente y tomar decisiones informadas para mitigar los riesgos y minimizar las pérdidas.

*Fotografía principal genérica - archivo.

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