Heladas afectan producción de peras del noroeste de Estados Unidos
Los huertos de peras del noroeste de Estados Unidos se han visto afectados este año por las bajas temperaturas, lo que ha provocado una disminución de la producción. Portalfrutícola.com conversó con Jim Morris, director de Comunicaciones de Marketing de Pear Bureau Northwest, sobre las variedades más afectadas.
Este año, el sector de la pera del noroeste de Estados Unidos ha experimentado un descenso sustancial del 31% en los volúmenes de cosecha, en comparación con la media de los últimos cinco años. Durante el período evaluado, la producción media se acercó a los 15 millones de cajas de 18kg. Este año, se espera que la cosecha final sea de poco más de 10 millones de cajas.
Morris explica que este descenso se debe a la climatología adversa que azota la mayor parte de las regiones septentrionales del país, especialmente en torno a la zona de Wenatchee, en Washington.
La Pear Bureau Northwest representa a 11 variedades de pera cultivadas en Oregón y Washington, en Wenatchee, Yakima, Mid-Columbia Valley y Medford.
“Hay agricultores que están casi en la frontera canadiense”, explica Morris. “Han tenido unos cuantos años, especialmente este, de temperaturas bajo cero con las que han tenido que lidiar”, agregó.
El descenso de este año no sólo se atribuye al clima de esta temporada de floración, ya que a los perales les gusta el frío, sino que los productores ya llevaban unos años con temperaturas más frías de lo normal, lo que provocó estrés en los árboles y, por ende, menos floración.
Si a esto añadimos las heladas de este año, entre abril y mayo, que redujo la polinización de las abejas y el número de flores, sobre todo en Wenatchee, el resultado es una campaña especialmente dura para el sector.
Morris afirma que, de todas las variedades, Bosc y Green Anjou fueron las más afectadas por las inclemencias climáticas.
“Bosc tuvo una cosecha realmente grande el año pasado, por lo que no sorprende ver un descenso este año, pero aún así experimentó una caída pronunciada”, explicó Morris.
“Y la otra variedad más afectada desde el punto de vista del volumen fue Green Anjou, que descendió un 36% respecto a la media de cinco años”, acotó.
El descenso de la variedad Green Anjou es bastante significativo, dijo, ya que se trata del cultivo más plantado de todas las variedades. “Habrá peras disponibles todo el año, pero no tantas como habríamos tenido normalmente”, añadió.
Morris espera que los precios al por menor compensen las pérdidas, pero dijo que los productores están actualmente tranquilos, ya que están terminando el proceso de cosecha y “sus miras están puestas en el próximo año y es nuestro trabajo trabajar con los transportistas para mover esa cosecha”.
El ejecutivo añade que los consumidores no deben preocuparse si ven un anillo marrón en sus peras este año. Este defecto, causado por las heladas de la región septentrional, no afecta al sabor ni a la textura de la fruta.
Morris señala que parte de la comunicación de este año con los consumidores consistirá en disipar cualquier temor de que haya algo malo en las peras que tengan este "anillo de heladas".
"Lo positivo es que no cambia el valor nutricional de la pera, no cambia el sabor ni la textura; es superficial, es sólo la piel y la pera sigue siendo muy buena", explicó Morris.
"Algunos consumidores tienden a comprar con los ojos y si ven una imperfección es menos probable que la compren, pero es sólo visual", destacó.
*Fotografía cortesía Jonathan Mast.