Benjamín Cillóniz: "Ica es el mejor lugar del mundo para producir uva de mesa”
La campaña de uva de mesa en Perú para el periodo 2024-2025 ha comenzado conforme a lo esperado, con un regreso a las fechas normales de cosecha.
Según Benjamín Cillóniz, gerente general de Exportadora Safco Perú, “la campaña pasada el arranque de Perú estuvo cuatro semanas adelantado, lo que causó una disminución considerable en el volumen de cajas, especialmente en el norte del país. Por eso, comparar esta temporada con la 2023-2024 puede ser engañoso. Técnicamente venimos con una caída relativa, pero ésta se debe al adelanto del año pasado”.
Sin embargo, anticipa que la producción superará los 64 millones de cajas de la temporada anterior, “es casi un hecho. A estas alturas, el grueso de los 21 millones de cajas embarcadas, según la data que he descargado el 25 de noviembre, provienen del norte, como es lógico. La gran incógnita es si el norte podrá repetir los 33 millones de cajas de la campaña 2022-2023 y por cuánto tiempo continuará con volúmenes importantes”, advierte.
Respecto a la región de Ica, Cillóniz explica que se espera un incremento significativo en las próximas semanas. “Ica está recién comenzando y debemos pasar el millón de cajas semanales a partir de la semana 50. Esta región suele tener un peak que se ha ido extendiendo y podemos tener unas ocho semanas sobre los tres millones de cajas semanales. Probablemente este año incluso veamos alguna semana que supere los cuatro millones”, dice.
“En conjunto, todo Perú ha tenido una sola semana sobre cinco millones de cajas, que fue la semana 52 en la campaña 22/23”, puntualizó.
Para el mercado de exportación, Cillóniz observa una demanda activa, particularmente en Europa y Estados Unidos.
“Europa viene mejor que el año pasado y esto se refleja en el volumen que está siendo enviado a ese destino en este momento. En cambio, el mercado chino está muy caído, como se anticipaba, debido a los resultados no tan favorables de la temporada pasada y a la fuerte competencia de los 120 millones de cajas de cereza que podría embarcar Chile este año (la pasada fueron 80 millones en números redondos)”, analiza.
Pero aclara que el mercado clave para la uva peruana sigue siendo Estados Unidos, donde la demanda actual es favorable para mantener buenos precios.
“La distribución semanal de nuestra cosecha, junto con la calidad que caracteriza a la uva peruana, nos permite mantener precios razonablemente buenos en este mercado tan importante para nosotros. La estimación que presenta Provid habla de 78 millones de cajas para esta temporada. Todavía vamos a unas 12 de las 30 semanas que dura aproximadamente nuestra temporada y hay incertidumbre del efecto que la sequía en el norte pueda tener sobre la fruta de esta temporada. Es cuestión de esperar 3 semanas más para tenerlo bastante claro”, comenta.
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La impermanencia de las cosas
Este año la falta de agua se ha sentido más en Piura que en Ica. “Piura depende principalmente de aguas de lluvia, mientras que Ica depende de aguas subterráneas, que no fluctúan tanto a corto plazo. Aunque el acuífero de Ica enfrenta un desafío a largo plazo, existen soluciones a la vuelta de la esquina que, inexplicablemente, aún no se han implementado”, dice.
Para Cillóniz, el retraso en la gestión de recursos hídricos en esta región representa “un fracaso estrepitoso de la industria en su conjunto”. El experto agroindustrial destaca el potencial de Ica: “Sin miedo a equivocarme, Ica es el mejor lugar del mundo para producir uva de mesa y probablemente otros cultivos también. La crisis hídrica del norte debería servir como un llamado de atención para gestionar mejor el agua en los distintos valles de la costa”.
Además del agua, Cillóniz señala una problemática en la logística. “El problema que asoma hoy en día como uno importante, es la posible falta de contenedores refrigerados. La cadena logística no es fácil de entender y supongo que hay razones suficientes, pero hoy en día tenemos los puertos que no tuvimos nunca y sin embargo no hay suficientes equipos disponibles para el volumen que exporta Perú”, dice.
A pesar de estos desafíos, el gerente general de Exportadora Safco Perú confía en la capacidad de innovación del sector agrícola peruano.
“Perú ha escrito una nueva historia en el manejo de uva de mesa. Nuestras condiciones son diferentes y requieren adaptaciones específicas a la de países vecinos, por ejemplo. Las innovaciones que están por venir podrían parecer salidas de una película de ciencia ficción, y no necesariamente vendrán de la industria de la uva”, anticipa.
¿El Perú siempre puede diferenciarse por un clima que les permite probar nuevas variedades más rápidamente que en otros países? Benjamín responde: “Por el momento sí. La precocidad que logramos es una gran ventaja sin duda alguna. Probar nuevas variedades en corto plazo es muy bueno, pero al final la mayor ventaja pasa por producir más, con menos. Somos más eficientes en el uso del agua, suelo, tiempo etcétera".
"Sin embargo, creo que sería irresponsable confiarnos en eso. Lo único constante es el cambio, así que debemos estar muy atentos. El día que los números cuadren para meter los parrones dentro de un invernadero, se acabó esa ventaja y puede que pasemos de exportar uvas a exportar técnicos que sepan de uvas”.