CEO de Fluent Cargo: "Sector de los productos frescos es especialmente vulnerable a las disrupciones en logística"
Fluent Cargo, proveedor mundial de soluciones de logística que realiza un seguimiento de los movimientos del transporte marítimo internacional, publicó nuevos datos que muestran que el conflicto en el Mar Rojo está forzando el reajuste más significativo de las rutas marítimas de los últimos años. Las cifras exclusivas muestran una caída del 33% en la capacidad de las rutas Asia-Europa.
El director general de Fluent Cargo, Archival García, habló con Portalfruticola.com sobre el impacto, diciendo que los desvíos están teniendo un efecto sustancial, porque "los buques se ven obligados a desviarse alrededor del Cabo de Buena Esperanza en Sudáfrica, añadiendo aproximadamente 3.500 millas náuticas a su viaje".
Para ponerlo en perspectiva, explicó que los buques están abandonando el Canal de Suez, por el que pasa el 10% del comercio marítimo mundial y volviendo a la larga ruta marítima que se buscaba evitar con la construcción del Canal en 1869. "No se trata de un desvío menor, sino de una alteración fundamental de las rutas comerciales mundiales establecidas", subrayó.
La crisis del Mar Rojo comenzó en octubre de 2023 e interrumpió el transporte marítimo mundial. Decenas de buques mercantes fueron atacados, lo que obligó a cientos de barcos comerciales a desviar su ruta en torno a Sudáfrica.
García la calificó como una situación compleja que "ha comprometido de hecho una de las rutas comerciales marítimas más cruciales del mundo".
La interrupción marítima ha afectado especialmente al comercio de productos frescos, ya que los tiempos de envío repercuten directamente en la calidad y el valor de los productos.
"Para los productos perecederos, como frutas y verduras, los tiempos de tránsito prolongados no sólo suponen un retraso en la entrega, sino que afectan directamente a la frescura del producto y a su valor de mercado", explica García.
"Esto crea una situación difícil en la que el aumento de los tiempos de envío y los costes están reduciendo los márgenes tanto para los productores como para los distribuidores", agregó.
Hoy, el principal reto, es el transporte, especialmente para los productores del hemisferio sur, como Brasil, Colombia, Sudáfrica, Chile y Perú. García señaló que los retrasos del Canal de Panamá debido a la sequía y los problemas de seguridad en el Mar Rojo han perturbado la ruta del Canal de Suez.
"Para los productores del hemisferio sur que dependen de estas vías fluviales para entregar productos fuera de temporada a los mercados mundiales, estas interrupciones están afectando su capacidad para mantener cadenas de suministro fiables", añadió. "El impacto va más allá de la logística y afecta a la frescura de los productos, los plazos de comercialización y la rentabilidad de sus operaciones".
Los efectos de las interrupciones se extienden a otras áreas esenciales para la industria, incluidos los precios globales y el medio ambiente.
"La naturaleza interconectada del comercio moderno significa que las perturbaciones en una región crean efectos en cascada en todo el mundo", explicó.
"El aumento de los costos está repercutiendo en una economía y una cadena de suministro mundiales ya de por sí sometidas a tensión, afectando a la vida cotidiana en todos los continentes y el desvío forzoso de rutas está provocando que los buques tengan que recorrer distancias sustancialmente mayores, mientras que algunas empresas están recurriendo al transporte aéreo para cumplir los plazos de entrega. Combinado con el aumento de los envíos por carretera para trabajar alrededor de la zona de conflicto, estamos viendo un notable aumento de las emisiones globales".
Agregó que las uvas, las aceitunas, el café, los aguacates y los kiwis son algunos de los productos perecederos que están sufriendo un impacto significativo. Más allá de los productos frescos, "la interrupción está afectando al transporte de productos básicos esenciales, como el combustible, los aceites y los cereales".
Según él, la solución no es sencilla. Para hacer frente a la interrupción, hay que aplicar estrategias inmediatas y a largo plazo. Una estrategia es desarrollar rutas alternativas que puedan "igualar o superar la eficiencia del Canal de Suez". Mientras tanto, trabajar con datos y plataformas tecnológicas como Fluent Cargo podría ayudar a las empresas a optimizar sus opciones de rutas.
"Sensonomic, una start-up noruega, está a la vanguardia de la adopción de datos y está transformando datos agrícolas brutos en una mina de oro de conocimientos, allanando el camino para prácticas agrícolas más rentables, sostenibles y regenerativas", añadió.
Explicó que "los indicadores de rendimiento y los planificadores de cosechas son lo más importante para los cultivadores, pero se necesita una cadena de suministro fiable para capitalizar las temporadas fructíferas".