Post cosecha en cerezos: manejos del árbol y suelo

La post cosecha en cerezos es una etapa crucial para garantizar la productividad y calidad de las próximas temporadas. Durante este periodo, se deben implementar prácticas agronómicas enfocadas en el manejo adecuado del árbol y del suelo. Estos esfuerzos no solo preparan el árbol para la próxima floración y fructificación, sino que también ayudan a mantener la salud del sistema radicular y la estructura del suelo.

Manejo del árbol en post cosecha

1. Recuperación nutricional

La cosecha demanda una gran cantidad de nutrientes, dejando al árbol en un estado de deficiencia que puede afectar su rendimiento futuro. Para contrarrestar esto:

• Aplicación de fertilizantes foliares: Se recomiendan formulaciones ricas en nitrógeno, fósforo, potasio, magnesio y micronutrientes como zinc y boro. Estos elementos son esenciales para la regeneración de los tejidos y la acumulación de reservas en la madera y las raíces.
• Fertilizaciones al suelo: Incorporar fuentes de nutrientes como nitrato de amonio o sulfato de potasio para reponer los niveles del suelo.

2. Poda post cosecha

La poda es fundamental para equilibrar la carga vegetativa y productiva del árbol:

• Eliminación de ramas dañadas: Cortar ramas secas, enfermas o mal ubicadas.
• Formación de la copa: Mantener una estructura abierta que favorezca la entrada de luz y aire, reduciendo el riesgo de enfermedades.
• Estimular brotes nuevos: Esto permite generar estructuras productivas para la próxima temporada.

3. Manejo de plagas y enfermedades

Tras la cosecha, los árboles pueden ser vulnerables a plagas como pulgones y enfermedades fúngicas. Las medidas preventivas incluyen:

• Aplicación de fungicidas y acaricidas: Priorizar productos con registro para cerezos y bajo impacto ambiental.
• Monitoreo constante: Inspeccionar el follaje y las ramas para detectar signos tempranos de infecciones.

4. Regulación hídrica

El riego adecuado es clave para la acumulación de reservas:

• Riego deficitario controlado: Promueve el endurecimiento de las yemas y evita el crecimiento excesivo.
• Evitar el estrés hídrico: La falta de agua puede debilitar al árbol y reducir su capacidad de recuperación.

Manejo del suelo en post cosecha

1. Mejoramiento de la estructura del suelo

La compactación del suelo es un problema común tras las labores de cosecha. Las acciones recomendadas incluyen:

• Labores de escarificado: Reducen la compactación y mejoran la infiltración de agua.
• Uso de enmiendas orgánicas: Incorporar compost o estiércol mejora la estructura y la actividad microbiana.

2. Cobertura vegetal

Las cubiertas vegetales entre hileras de árboles tienen beneficios múltiples:

• Prevención de la erosión: Protegen el suelo frente al impacto de las lluvias.
• Aporte de materia orgánica: Al descomponerse, las cubiertas enriquecen el suelo.

3. Manejo de la microbiota del suelo

Un suelo saludable depende de su equilibrio biológico:

• Inoculación con microorganismos beneficiosos: Productos con micorrizas y bacterias promotoras del crecimiento vegetal.
• Evitar agroquímicos agresivos: Minimizar el uso de herbicidas y fungicidas que puedan afectar a los microorganismos benéficos.

4. Monitoreo de humedad y nutrientes

• Uso de sondas de humedad: Para determinar las necesidades reales de riego.
• Análisis de suelo post cosecha: Identificar deficiencias y ajustar el programa de fertilización.

Manejo de fertilización en post cosecha de cerezos

1. Recuperación nutricional

La cosecha demanda una gran cantidad de nutrientes, dejando al árbol en un estado de deficiencia que puede afectar su rendimiento futuro. Para contrarrestar esto:

• Aplicación de fertilizantes foliares: Se recomiendan formulaciones ricas en nitrógeno, fósforo, potasio, magnesio y micronutrientes como zinc y boro. Estos elementos son esenciales para la regeneración de los tejidos y la acumulación de reservas en la madera y las raíces.
  • Dosis sugeridas:
    • Nitrógeno (N): 15-25 kg/ha, dependiendo de la carga frutal y el estado nutricional del árbol.
    • Fósforo (P2O5): 10-20 kg/ha, especialmente si los niveles en el suelo son bajos.
    • Potasio (K2O): 20-40 kg/ha, fundamental para el almacenamiento de reservas energéticas.
    • Micronutrientes: Aplicaciones de zinc (Zn) y boro (B) en dosis de 1-2 kg/ha y 0.5-1 kg/ha, respectivamente.
• Fertilizaciones al suelo: Incorporar fuentes de nutrientes como nitrato de amonio o sulfato de potasio para reponer los niveles del suelo.

Conclusión

El manejo post cosecha en cerezos es una etapa estratégica que requiere un enfoque integral para asegurar la longevidad y productividad de los árboles. Las prácticas adecuadas en el manejo del árbol y del suelo permiten optimizar los recursos, prevenir problemas fitosanitarios y establecer las bases para una cosecha exitosa en la próxima temporada. Implementar estas estrategias no solo mejora el rendimiento, sino que también contribuye a la sostenibilidad a largo plazo del huerto.

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