Donald Trump retoma el poder buscando enriquecer el país a través de aranceles y extracción de petróleo
Fiel a su estilo, Donald Trump asumió por segunda vez la presidencia de Estados Unidos el 20 de enero y puso en marcha de forma inmediata medidas esperadas y cuestionadas a nivel global.
Trump se mostró firme en su postura, asegurando que con su regreso comenzaba una “era dorada para Estados Unidos” a través de una reestructuración completa de la economía y políticas internacionales del país.
Fue así como reafirmó su intención de imponer aranceles del 25% a México y Canadá a partir del 1 de febrero, debido a que éstos "no han hecho lo suficiente para detener la migración y el tráfico de fentanilo."
“Estamos pensando en términos del 25% a México y Canadá, pues están permitiendo el ingreso de un enorme número de personas. Canadá también abusa fuertemente, grandes cantidades de gente viniendo y de fentanilo llegando”, dijo.
Además, en su discurso de inauguración, aseguró que planea fortalecer la economía americana con un plan arancelario a las importaciones extranjeras.
“En lugar de imponer impuestos a nuestros ciudadanos para enriquecer a los países extranjeros, impondremos aranceles e impuestos a los países extranjeros para enriquecer a nuestros ciudadanos”, dijo Donald Trump.
Agregó que “estamos creando el servicio de ingresos externos para recaudar todos los aranceles, derechos e ingresos, cantidades masivas de dinero que entrarán a nuestra tesorería, procedentes de fuentes extranjeras”.
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Canadá responde
Después de las declaraciones emitidas por Donald Trump, la ministra de Relaciones Exteriores de Canadá, Mélanie Joly, llamó a los canadienses a la calma. Joly aseguró que ya tienen un plan en marcha para prevenir los aranceles, “trabajaremos en la preparación de una respuesta, trabajando con el gabinete para ver posibles represalias”.
A largo plazo, dijo que seguirán peleando por sus intereses y defender trabajos a lo largo del país.
“Le pedimos a todos los líderes políticos canadienses que se mantengan unidos, ya que ahora más que nunca debemos poner nuestro país primero”, indicó Joly.
Por su parte, Dominic LeBlanc, ministro de Finanzas del país norteamericano, dijo que llevan semanas preparándose para este anuncio, por ende no los tomó de sorpresa debido a lo impredecible que puede ser Donald Trump.
“Nuestro país está absolutamente preparado para responder a cualquiera de estos escenarios”, dijo el ministro. Sin embargo, “seguimos creyendo que sería un error por parte del gobierno americano aplicar estos aranceles, un error en cuanto al costo de vida en Estados Unidos, el empleo en Estados Unidos y la seguridad de las cadenas de suministro, y sería claramente un momento difícil para la economía de nuestro país”.
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Reacciones desde México
En noviembre, cuando el entonces presidente electo mencionó por primera vez su intención de imponer aranceles a todas las importaciones mexicanas, la presidenta del país, Claudia Sheinbaum, fue clara al decir que "a un arancel, vendrá otro en respuesta".
Por su parte, el ministro de Economía del país, Marcelo Ebrard, aseguró que imponer los aranceles era "como dispararse en el pie".
Agregó que los aranceles traerían consecuencias graves para la economía estadounidense, incluyendo la pérdida de 400.000 empleos, una desaceleración del crecimiento económico y un impacto negativo en empresas y consumidores.
Ebrard alertó que los aranceles duplicarían los costos fiscales que enfrentan las empresas estadounidenses que producen en México. "El impacto para las empresas sería enorme", afirmó. “México no busca conflictos ni divisiones, sino construir una región más fuerte y unida”, dijo Ebrard.
Impacto en las agroexportaciones chilenas
El dólar estadounidense inició la jornada de ayer con un valor de 1.005,08 pesos chilenos en promedio, lo que representa una baja de un 0,4% frente a los 1.001,12 pesos de la jornada previa.
El valor del dólar sobre la barrera de los 1.000 pesos chilenos se comenzó a observar desde inicios de 2025. Para conocer la mirada e impacto en la economía de la agroindustria, Portalfruticola.com conversó con el analista económico de la Universidad Andrés Bello y Open BBK, Alejandro Ursúa, quien explicó que la economía chilena ha tenido una moneda que ha estado relativamente debilitada, “de hecho tuvo una depreciación de un 5% aproximadamente durante 2024”.
El economista agregó que dicha situación fue decreciendo cuando fue elegido el actual presidente de Estados Unidos. El especialista señaló “hay que recordar que dentro de las principales promesas de campaña del presidente Trump, está fortalecer la economía americana y principalmente para eso habló de una guerra comercial 2.0 prácticamente con China”.
Explicó que eso genera una especulación y al mismo tiempo afecta a las economías emergentes, como el caso de Chile que es un país exportador.
En ese sentido comentó que dicha situación puede afectar a Chile, ya que dos de sus socios comerciales -Estados Unidos y China- estarán enfrentado, "por otro lado, vemos que China tiene un crecimiento más débil de lo esperado el último tiempo, sumado a las barreras arancelarias de las ventas de sus productos, también será un país que demandará menos insumos para su producción”.
Como consecuencia de lo anterior, en el mercado chino “vemos que pueden tener una baja en su demanda y eso generaría menos dólares en la economía nacional; de alguna manera se fue configurando una tormenta perfecta que hace que la economía chilena esté con un dólar sobre los $1.000”.
Proyección
Ursúa proyectó que durante los próximos meses se espera que se mantenga la divisa americana en estos valores, “y tenemos que estar atentos al rendimiento de la economía de Estados Unidos. Cuando en Chile tenemos un dólar fortalecido, el sector agroexportador y turísticos se ven bastantes contentos porque los productos están teniendo un mejor ingreso”.
A su juicio, la economía siempre tiene dos caras: “Por un lado tenemos a Chile, un país netamente importador de productos. Aproximadamente el 75% de los productos que se calculan en la encuesta de consumo familiar, son productos importados. Cuando tenemos un dólar a mil pesos, automáticamente lo que empieza a pasar es que se empieza a importar inflación, lo que podría ir aumentando la presión sobre la economía chilena los próximos meses”.
La buena noticia, dijo, “es que por un período de tiempo van a tener un mayor ingreso de pesos por la misma cantidad de productos exportados, pero también hay que tener mucho cuidado por los efectos colaterales de un dólar sobre los $1.000 por un tiempo largo en la economía chilena, que principalmente son factores de inflación a causa de la composición de nuestra canasta de consumo, donde un porcentaje muy importante de los productos viene efectivamente del exterior”.
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Recomendaciones
Ursúa manifestó que lo relevante es ser capaces de poder navegar en esta complejidad, “y uno de los desafíos importantes de los productos chilenos que se exportan al mundo, es buscar nuevos destinos, como por ejemplo Asia Pacífico, no solamente pensando en China, otros mercados como India o mercados europeos que de alguna manera también ven con buenos ojos la producción de frutas chilenas”.
Especificó que los productos que están se están siendo cosechados actualmente y siendo exportados fueron con insumos barato, “entonces obviamente es el mejor de los escenarios. Pero tenemos que considerar la nueva compra de insumos para preparar el nuevo periodo de cultivo” y en ese sentido ver el comportamiento del dólar.
Al respecto la recomendación del economista “es tener mucha cautela y ser planificado en los insumos. Además de tratar de administrar de buena manera el flujo de caja”.
Ursúa finalizó diciendo que, “en la medida que el sector tenga claro cuáles son los niveles de ingreso y cómo se pueden optimizar la distribución presupuestaria, les recomiendo ser muy racional respecto al consumo y tratar de planificar muy bien el flujo de caja”.